domingo, 1 de mayo de 2011

Beatificación de Juan Pablo II

BEATUS
Al igual que la Madre Teresa, apenas a seis años de su defunción, y ante el clamor del pueblo de Dios: "Santo súbito", accede el Papa polaco al honor de los altares. No solamente la Iglesia, sino el mundo entero celebran al hombre que cambio el curso de la historia derrumbando la cortina de hierro. Pero celebran no solo su popularidad, su éxito, sino su santidad, por ser hombre de Dios y de oración, y por haber llevado la cruz del deber y del dolor con heroicidad hasta lo último.
                                                                                       Comisión de Pastoral de la U.P.F.

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